La escultura dependía mucho de la arquitectura y las figuras apenas se separaban de la superficie que ocupaban.
Su lugar principal eran las portadas, columnas y capiteles.
Las portadas, donde también se representaba el Pantocrátor, tenían varios elementos característicos:
- El tema predominante solía ser el Juicio final con Cristo rodeado de los 4 evangelistas (Pantocrátor). Se sitúa en el tímpano
- En las arquivoltas, los arcos abocinados que rodean al tímpano, aparecían los ancianos del Apocalipsis o escenas del Antiguo y el Nuevo Testamento. Sobre el dintel de la puerta aparecían escenas parecidas.
- En el parteluz aparecía la Virgen con el Niño en brazos o un personaje destacado (obispo, apostol...)
- En los capiteles de las portadas aparecían escenas de la Biblia, de las vidas de santos pero también temas vegetales, escenas cotidianas o terribles escenas del Apocalipsis con monstruos representando el pecado y el Infierno (para provocar el rechazo hacia él).
Pero también había tallas religiosas en madera y policromadas (con varios colores) que se solían colocar en los altares de iglesias, monasterios, conventos y ermitas. Los principales temas eran el Cristo Crucificado (hiératico o quieto, con 4 clavos, vestido, pegado al marco y sin mostrar ningún dolor) y la Virgen con el Niño en brazos (hierática, sin comunicación con el hijo y haciendo de trono).